crecido en las playas de cádiz, evil evans es uno de esos músicos que deslumbran por la calidad de su sonido y canciones a la primera. a solas pero sobradamente preparado, ricardo viene a engrosar las gratas sorpresas recibidas últimamente desde el sur de españa con una maqueta (su primera: "música animalista") de primer orden y digna de convertirse en una joyita para aquellos amantes del pop más clásico e íntegro. y es que a veces con talento basta y más allá de métodos, compañías o comentarios, lo que importa y lo que queda son las canciones. canciones enormes en este caso, coquetas pero espontáneas, sencillas pero profundas, con los arreglos justos y las letras ideales. un refugio pop perfecto para rellenar las esquinas de este helado findesemana. CR
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